¿Habéis hecho alguna chuleta para un examen? Yo, jamás. No tanto por mi sentido de la ética, del que se puede prescindir cuando te juegas la última asignatura de la carrera, como porque soy una negada para hacer trampas. No puedo mentir, mi cara me delata incluso si intento decir a una madre, con su recién nacido arrugado y con la nariz congestionada, que me parece precioso. Mi solución, por cortesía, es no hablar de más e intentar buscar otros adjetivos, por ejemplo ¡qué espabilado! o ¡está muy grandote!
Pero una vez superados los estudios, tenemos vía libre para copiar. En el trabajo, utilizamos calculadora y, si nos surge una duda con los deberes del niño, nos escondemos y buscamos la respuesta en google. Por eso, si tenemos una cena más o menos formal y no estamos seguros de dónde colocar el plato del pan, tranquilos, yo os presto mi chuleta.
Esta es la mesa de mi casa preparada para la cena de Nochebuena. Cumple las normas básicas de protocolo y es bastante clásica, pero nos puede servir como ejemplo. Si invitamos al jefe o a alguien con quien no queremos arriesgar podemos seguir algunas reglas sencillas:
- El mantel debería ser de hilo, blanco o crudo.
- Evitaremos las servilletas de papel y debemos tener suficientes de repuesto, por si se ensucian demasiado. Se suelen colocar a la izquierda del plato o encima, aunque en algunos manuales también permiten colocarlas a la derecha y dobladas en forma de triángulo o rectángulo. No deberíamos meterlas en las copas y reservaremos los doblados "artísticos" para reuniones familiares.
- Los cubiertos, se colocan de manera que utilizamos primero los que están más alejados del plato.
- Podemos prescindir del bajoplato, que es solo decorativo, pero no debemos poner la mesa con un sólo plato ni superponer dos del mismo tamaño.
- La decoración no pude molestarnos al hablar con los demás comensales, por eso no debe ser muy voluminosa. Las velas sólo se utilizan en las cenas y, al igual que las flores, no deben tener olor.
- El pan se coloca a la izquierda, sobre un platillo y, si queremos, podemos acompañarlo de un cuchillito para untar la mantequilla, pero no para cortarlo, porque lo partimos siempre con las manos.
Y ahora que nos sabemos las reglas, ya podemos romperlas. Cada vez se llevan más las mesas originales, e incluso tematizadas para la ocasión. Podemos utilizar manteles estampados, caminos de mesa, pareos o arena de colores. También se lleva mezclar vajillas, cristalerías o cuberterías. Podemos combinar los cinco preciosos platos de postre que nos quedan de la vajilla de la abuela con otros básicos, las cucharillas de plata con la cubertería de inox o vasos para el agua con copas de vino. Y sobre todo, debemos saber que lo más importante en protocolo es
ser natural, sencillo e intentar que todos los invitados se sientan
cómodos y disfruten de la reunión.
Aquí os dejo la chuleta, un esquemita básico por si en algún momento dudáis.
1. SERVILLETA: A la izquierda o encima del plato
2. TENEDOR DE ENTRADA O PESCADO
3. TENEDOR DE CARNE
4. PLATO PARA EL PAN
5. CUCHILLO DE MANTEQUILLA
6. CUCHARA DE POSTRE
7. TENEDOR DE POSTRE
8. COPA DE AGUA
9. COPA DE VINO TINTO
10. COPA DE VINO BLANCO
11. CUCHILLO DE CARNE
12. PALA DE PESCADO O CUCHILLO DE ENTRADA
13. CUCHARA DE SOPA
14. BAJOPLATO
15 / 16. PLATOS
No hay comentarios:
Publicar un comentario