El paté de centollo de la crisis

Vale, estamos en crisis, pero eso no quiere decir que dejemos de darnos un homenaje de vez en cuando. ¿Que no hay para una mariscada? No importa, hacemos un paté de centollo sin centollo y ¡listo!.

Lo importante es tener una excusa para reunirse con los amigos y pasar un buen rato. Eso no tiene precio.

 

Esta carlota de paté de "centollo" la hizo mi amiga Romina y podéis ver la receta en:

webos fritos

INGREDIENTES:

- 1 lata de anchoas en aceite

- 1 lata de mejillones al natural (ojo, no en escabeche, ni al vapor...)

- Palitos de sucedáneo de cangrejo

- Mayonesa

- Un cuarto de cebolla dulce pequeña

- Dos cucharadas de vino fino seco

Cuanto mejores sean los ingredientes, mejor será el resultado.

ELABORACIÓN:

Pasamos las anchoas por un chorro de agua fría para quitarles el exceso de sal y descongelamos los palitos de cangrejo (si son congelados).

Ponemos en el vaso de la batidora la cebolla y la misma cantidad de palitos que de mejillones y anchoas, por ejemplo (8 palitos, 8 mejillones y 8 anchoas). Ttrituramos, añadimos el vino y la mayonesa y seguimos triturando hasta obtener una pasta homogénea. Troceamos cuatro palitos de surimi muy finos y lo deshacemos para conseguir la textura del centollo. Mezclamos con la elaboración de la batidora y lo emplatamos.

Podemos presentarlo en un cuenco, en una cabeza de centollo (que tengamos por casa de cuando no había crisis, je je), en tartaletas o, como véis en la foto, en forma de carlota, rodeada de picos.

Para conseguir que nos quede así de mono, ponemos el paté dentro de un aro de emplatar, alisamos la superficie y desmoldamos con cuidado. Después, pegamos alrededor los palitos de pan y decoramos con una cinta. Necesitaremos más palitos o tostas para acompañar, hasta que alguien se atreva a desmontar el invento.